Si te apasionan las historias, puedes escuchar más visitando el Museo Diocesano de Arte Religioso Nuestra Señora del Cisne, ubicado en la parroquia de El Cisne a 70 km de Loja (1h 30 minutos aprox.).
Al llegar, no podrás perder de vista la imponente Basílica de El Cisne, en cuya parte baja se encuentra el Museo donde un amable guía te esperará. Podrás apreciar algunas vestimentas de la Virgen de El Cisne como sombreros, vestidos típicos, joyas, entre otras prendas que han sido parte de su vestuario durante la peregrinación que realiza cada año en el mes de agosto a la ciudad de Loja.
Lo interesante en esta visita es ver los obsequios que han sido regalados por los fieles como agradecimiento por los favores, sanaciones o cualquier otro milagro recibido de la Virgen de El Cisne «La Churonita». Los objetos son de diferentes formas y materiales, incluyen zapatos, personas, casas, vehículos, árboles, pendientes, entre otros, todos en miniatura con diseños especiales. Muchos de ellos simbolizan el milagro recibido y su valor depende de ello. Cada objeto guarda y cuenta una historia que es relatada por el guía sí se lo solicita. Estos regalos reflejan un testimonio de fe para los peregrinos, pero también crean una memoria colectiva conservada para el conocimiento y disfrute de las personas.
Hay tantas historias como objetos, una de ellas cuenta lo siguiente:
Se dice que una señora de bajos recursos económicos, trabajaba recolectando y clasificando basura, con ello mantenía a sus hijos, y su anhelo más grande era tener su propia casita. Era muy fiel a la Virgen de El Cisne, por lo que siempre cada año participaba en la peregrinación pidiéndole con mucha fe a la Churonita que le bendiga en su trabajo o con una mejor oportunidad para construir su casa.
Un día, mientras recolectaba basura encontró un cuadro grande, un poco deteriorado pero muy bonito, lo llevó a su casa, lo limpió y lo colgó en la pared del lugar donde vivía. De pronto, después de unos días, un señor golpeó su puerta, ella abrió y éste le preguntó sobre un sitio que estaba buscando. Ella le ayudó amablemente con la información. De repente, el señor alcanzó a ver la pintura que estaba detrás de ella, y le consultó si la estaba vendiendo porque era un cuadro muy hermoso, y le ofreció una alta suma de dinero para comprarlo. La señora se quedó sorprendida, pero a la vez un poco incrédula de lo que escuchó. El señor le ofreció ir al otro día con el dinero para llevarse el cuadro, y en efecto, así se cumplió.
Finalmente, con ese dinero la señora construyó su casa y atribuyó el favor recibido a la Virgen de El Cisne. Una vez terminó la obra, la señora regaló al Museo un obsequio representativo del milagro, una casa en miniatura de metal similar a su casa.
Estas y otras historias curiosas podrás explorarlas durante tu visita al Cisne.
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